(Del lat. vulg. plovĕre, y este del lat. pluĕre).
2. intr. Dicho de algunas cosas, como trabajos, desgracias, etc.: Venir, caer sobre alguien con abundancia. U. menos c. tr.
Llovía en verano. Esa lluvia que hace que huela a tierra mojada con el calor, que es agradable y que no te importa que te moje. Aún así decidimos reguardarnos, poder sentarnos en un sitio seco y compartir un cigarrillo. Me pedías permiso por cualquier cosa. Para apoyarte contra mí. Para pasarme un brazo por la espalda. Para apoyar tu cabeza en mis piernas. Y tú me lo pediste, y yo te lo negué. Y yo te lo pedí, y tú me lo negaste. Un beso.
Pero nos pusimos de acuerdo. Y desde ese día, no dejamos de hacerlo.
Pero nos pusimos de acuerdo. Y desde ese día, no dejamos de hacerlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario